jueves, 29 de diciembre de 2011

'Cultivando zanahorias...'

Leí por alguna revista hace no mucho tiempo que las personas que vivimos solas, además de a acrecentar nuestras manías, tendemos en nuestra vida personal hacia uno de estos dos extremos: o nos invade la pereza y la abulia (el famoso ‘Total… ¿para qué?' ), o por el contrario tendemos hacia la hiperactividad con intrincadas agendas que a veces nos cuesta memorizar…
Por aquella tendencia mía a no privarme de nada, en los últimos años he vivido ambas situaciones, y como secuela de la primera habito una casa sin decoración, pintura de color, lámparas, cortinas o espejos en los baños; y por el contrario este año que ahora acaba a veces se me ha hecho dura esa manía mía de llevar toda mi agenda en la cabeza.
Y aunque sigo buscando mi término medio, que se me antoja más razonable, mientras tanto prefiero andar siempre enredado con un variado número de actividades, como puedan ser volver a estudiar, pagar clases de natación (a veces voy), pintar, leer, pasear, veros a algunos, o incluso mantener este blog.
Aunque no sabría recordar si la he llegado a ver realmente, tengo que reconocer que siempre me ha causado una cierta mezcla de pena y ternura la típica caricatura de un burro con orejeras persiguiendo una zanahoria.
Supongo que en mi caso la pereza me invadió cuando conseguí muchas zanahorias que ansiaba durante años, y también había perseguido con mis orejeras puestas….
¿Qué os voy a contar?: Estudia en el colegio, en el instituto, una carrera en mi caso, busca un trabajo, trabaja, ahorra, compra un coche, ahorra más, lo de encontrar pareja es otra historia, compra una casa, asciende en el trabajo…
Total, que sin zanahorias me quedé.
Tras muchas suelas gastadas meditando por la playa, ya independizado y despojado de orejeras, decidí seguir persiguiendo zanahorias, pero esta vez cultivadas por mí.
Aunque con mi mentalidad de eterno estudiante los años son cursos que comienzan en septiembre, tengo que deciros que me encanta cada temporada decidir el tipo, número y tamaño de las que voy plantando….

Por todo ello deseo que en el 2012, por muy difícil que se presente, persigáis vuestras propias zanahorias, y consigáis la mayoría.

Un abrazo.
Santi.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

'De jerseys rotos y besos que no se dieron.'

- Pues la verdad es que tengo mis ahorros en bolsa, pero quiero dejar de dedicarle tiempo. Le presto demasiada atención y es….; como si fuera dinero de mentira.
- (…)
- Fíjate que puedo perder bastante dinero un mal día y no me afecta, pero en cambio, si me compro un jersey de unos sesenta euros, y me lo rasgo accidentalmente, me da bastante más disgusto.
Asentía copa de vino en mano impertérrito a los razonamientos de este querido y ya mayor compañero de trabajo en una cena hace unos meses.
Y es que, aunque en ambos casos hablaba del dinero conseguido fruto de toda una vida trabajando, lo que decía tenía muchísimo sentido. En los últimos años una de las causas más importantes de la crisis ha sido ésa, poner un precio muy elevado a una importante cantidad de bienes, en base a expectativas e ilusiones muchas veces infundadas, sin un soporte tangible.
Supongo entonces que, cuando el valor de algo se desploma de manera súbita, la ilusiones van raudas a otro lugar, o se pierden en un limbo parecido al que van aquellos besos que se quisieron dar en un momento preciso y no se dieron…
Por todo ésto, para el año que viene os deseo que baséis vuestros deseos e ilusiones en un soporte real, y que fruto de vuestro esfuerzo, sentido común y paciencia (*), más un poquico de suerte, los vayáis consiguiendo si no todos, gran parte de ellos.

Felices fiestas en compañia de vuestros seres queridos.
Un  abrazo.
Santi.

(*) Como los de la entrada que da nombre a este blog.

viernes, 9 de diciembre de 2011

'Recetas, recuerdos y trenes que que se perdieron.'

Le encanta gruñir por todo y de todos como seña de identidad.
Hace tiempo que frecuento su pequeño local.
No se puede decir que a diario, pero es rara la semana que no aparezco a tomar el primer café de la mañana, o alguna tapa rápida a unas horas más próximas a las de merienda que a las de la comida cuando las fechas de la entrega de alguna presentación de proyecto me apremian.
Esta forma de ser tan suya, me genera cierta simpatía, pues pienso que en general los gruñones y antipáticos, a peor no van a ir y en su mayoría son gente con buen fondo de armario moral.
En cualquier caso, sumando a mi timidez galopante muy pocas ganas de polemizar, la verdad es que apenas intercambio palabras con él, y una vez allí (suelo ir solo) me dedico al periódico o a hacer como que miro la tele.
Por todo ello cuando me dijo aquel día estando los dos solos que aquella tapa que me ofrecía para comer le gustaba mucho a un ser querido que ya no estaba, no pude articular palabra.
-- o –
Aunque acabábamos de comenzar las clases particulares de inglés y apenas nos conocíamos, no había motivo para no ir caminando juntos hasta el metro, pues íbamos a tomar la misma línea.
Aquella chica tenía mi edad, y era universitaria como yo en aquella época.
Hace ahora una década y no recuerdo cómo empezó la conversación, pero sería informal hasta llegar a la parada de metro, se iría haciendo más íntima al bajar las diferentes escaleras mecánicas, y para cuando nos sentáramos a esperar el tren en un banco de la estación, sus ojos se tornarían vidriosos y no podría hablar sin dejar de emocionarse.
Me estuvo contando sus difíciles circunstancias familiares y personales hasta que se serenó. Me imagino que además de escucharla, lo que le pudiera decir le sirvió de alivio.
No recuerdo cuantos trenes pasaron delante nuestro …
-- o –

Aquel fin de semana en el máster se impartía el módulo de ‘Inteligencia emocional.’.
Recuerdo haber leído embelesado el libro del mismo nombre en mi época de estudiante. Con él desarrollé incluso la típica habilidad madrileña de caminar leyendo en los trasbordos de las diferentes paradas de metro.
Como en cualquier otro, es posible que este módulo no nos importara a todos por igual…
El profesor, un importante ex-directivo jubilado agitaba conciencias deliberadamente con preguntas  políticamente incorrectas, haciendo de la ironía una herramienta pedagógica más.
En un momento de la clase pregunta:
- ¿Alguien tiene alguna habilidad, algo que haga bien?
- Sí. (risas).
- Y además.. ¿Nos la podrías decir?
- Ah, sí. Genero confianza.
- Mmmm Bueno.


domingo, 4 de diciembre de 2011

'De ranitas y leñadores: Mi MBA'

-       ¿La parte filosófica?

-       Sí, la parte filosófica, en el máster, además de las herramientas administración financieras me enseñaron muchos principios  de gestión válidos tanto para la vida profesional como para la personal, sobre todo en la parte de estrategia y recursos humanos…

Supongo que esta respuesta me ha tocado darla últimamente  con cierta frecuencia, a todos aquellos que os habéis interesado por el máster  de administración y dirección de empresas (MBA) que acabé este verano con no pocos esfuerzos, pero eso sí, con muchas más satisfacciones…
Tras pasar la entrevista inicial en Julio del año pasado y comenzarlo en Octubre de aquel año, hasta finalizarlo en Julio de este año, han sido unos meses intensísimos de muchas horas de clase, todo tipo de trabajos tanto para entregar como para presentar en clase. Y lo último y más importante: conocer a una treintena de excelentes compañeros a los que ahora considero amigos, con los que pasé muchas más horas que con mi propia familia, compartiendo además de tantas y variadas tareas, muchos buenos ratos tanto en el campus de Espinardo como por el centro de Murcia, viviendo de alguna manera un año casi universitario, en mi caso, una década después del último años de carrera…
Acabado el curso y con cierta nostalgia… ¿Qué me queda de la filosofía que os comento? Brevemente os resumo algunas ideas de ciertos módulos por si os fueran de utilidad,  en vuestra vida tanto profesional como personal..
  • Estrategia: Las empresas tienen alma en forma de objetivos (visión), planteamiento de la forma de conseguirlos (misión), y unos valores que mantener por el camino. Deben definirse con precisión para que todos los esfuerzos vayan en la dirección de conseguirlo… (*)
  • RR.HH: No importa tanto lo que haces (aptitud) sino cómo lo haces (actitud), qué valor aportas a tu puesto que no aportarían otros…
  • D.Financiera: ‘Si te escondes del riesgo, también te escondes de las oportunidades’ (J.P. Morgan).
  • Marketing: La regla nemotécnica MICASO para recordar con facilidad las motivaciones de compra y que se traduce en Moda, Interés, Comodidad, Afecto, Seguridad y Orgullo.
  • Habilidades Directivas: “… Si tuviera 8 horas para cortar un árbol, 6 de ellas me las pasaría afilando mi hacha.” (Abraham Lincoln), sobre la preparación. Y finalmente la excelente historia de la ranita en agua hirviendo sobre la importancia de no posponer decisiones, dejándonos llevar por una realidad cotidiana que nos a priori nos resultáis, aunque incómoda, soportable….
Espero no haberos aburrido mucho.
Un abrazo.
Santi.
(*) Por si tenéis más curiosidad, aquí os dejo como ejemplo los enlaces a la misión, visión y valores  de algunas conocidas marcas comerciales:

domingo, 27 de noviembre de 2011

´La bolsica de alcachofas.'

            Supongo que ser nieto de agricultores sin tierra, y criarte en una pedanía en medio del Campo de Cartagena marca para siempre, y en mi caso, entiendo que felízmente.
            En un pueblo pequeño como mi querido Pozo Estrecho, el reducido círculo de vecinos con el que tu familia entabla amistad, con el paso de los años pasa a formar parte de ella.
            La verdad es que hace ya tiempo que no vivo allí pero recuerdo con mucho cariño aquellos sábados en los que me despertaba no muy tarde y al llegar aun con legañas a la cocina a desayunar no había ni silla por la cantidad de allegados que espontáneamente se había pasado a compartir ese momento con nosotros.
Tampoco era raro que alguno de ellos trajera bollos o pan para el desayuno, algún embutido, un trozo de algún bicho recién matado o cualquier tipo de verdura; y mi madre a su vez les daba algo de lo que había recibido el día anterior de otros familiares o amigos.
             Pudiera parecer que esto es algo similar al trueque, en cuyo caso si finalmente nos echan del euro, en mi pueblo llevaríamos ventaja para subsistir, pero la verdad es que nadie daba nada esperando recibir algo a cambio, todo era fruto de una costumbre de toda la vida…
            En este sentido, lo de la verdura siempre me ha hecho especial gracia, y con frecuencia he presumido en ciudad, de que en los pueblos compramos poca verdura, pues con éste sistema de ir dando de lo que tienes, hemos ido comiendo (incluso engordando algún kilillo de más algunos, pero no será de la verdura supongo), pues nunca han faltado en casa melones, sandías, naranjas, lechugas, etc.
Tampoco era raro llegar a la entrada de casa a veces y encontrarte colgada en el pomo de la puerta un bolsica de alcachofas de alguien que pasó a darla en persona y no nos encontró, o que alguna vecina trajera un plato de comida de lo que había cocinado ese día, o el último postre que había preparado para que lo probásemos.
            Debido a todas estas cosas que he vivido en casa, y en el pueblo en general, puedo decir con orgullo que tengo una suerte enorme de haber sido educado de esta manera, a compartir lo que tengo, a disfrutar dando.
Recuerdo con mucho cariño por ejemplo, los años buenos de la construcción, en que llegaba a casa con tres o cuatro lotes de navidad, y me juntaba con mi madre y mi hermana para agruparlo todo con sus respectivas cestas, reorganizarlo en nuevos paquetes para después en los días siguientes regalarlos casi todos.
Vienen años difíciles y además del dinero ‘negro’ conocido por todos, hay algo que hasta ahora está manteniendo la cohesión social, y es sin duda la solidaridad de las familias, que para mí, echando la vista atrás, no es otra que la bolsica de alcachofas…

            P.D. Los galileos, con nuestra particular idiosincrasia, preferimos el término de origen árabe alcauciles, al igual que usamos con frecuencia para otras verduras los términos pésoles, o bajocas, por ejemplo. Tenía que decirlo.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

'Aquí encontré mi pequeña geoda.'

No es poca la gente que me pregunta qué hago viviendo solo todo el invierno en la playa, y la verdad es que intentando ser breve, a todos les respondo que aunque sólo llego de la oficina de Murcia apenas a cenar algo y a dormir, me encanta esta forma de vida.
Pese a que no solía venir mucho  a la casa de mis padres en Los Alcázares durante mis inviernos en mi época de instituto, la verdad es que tras mi estancia durante la carrera en Madrid, una de las cosas que más echaba de menos era el mar. Así que supongo que si los años anteriores apenas había ido, era porque me tranquilizaba el hecho de saber que podía volver cuando quisiera desde Pozo Estrecho (y así lo hacía incluso en bicicleta más de una vez).
Tras mi vuelta, me planteé que sería ideal poder pasear a diario por el paseo de Los Alcázares, a la hora que fuese, y cuando por fin ahorré para la entrada de mi vivienda, al tener un trabajo itinerante en aquellos momentos, no había inconveniente para establecerme en  Los Narejos, pues a veces estaría lejos, pero otras estaría cerca de mi puesto de trabajo…
Y así lo hice, y tras algún añico adicional antes de mudarme para ahorrar para muebles, voy ya para el cuarto invierno aquí…
Supongo que se me iluminan un poco los ojos cuando explico a amigos y conocidos lo bien que se está aquí los fines de semana todo el año, con un clima en general excelente y los chiringuitos siempre abiertos en un casi eterno verano…
Pero lo que apenas cuento son la suma de sensaciones que experimento noches como la de hoy, en la que en ausencia de viento y frío, con una mar absolutamente en calma, y por un paseo vacío, siento moverme en un instante congelado, dentro de una preciosa fotografía donde son compatibles la belleza del paisaje con un cierto aire nostálgico…
Siempre me han gustado las geodas, pues son una muestra más del triunfo de la belleza incluso en las más duras condiciones, como son la presión y la temperatura a la que algunas se forman, incluso en pequeñas burbujas de gas.
Posiblemente me estoy enfrentando estos años a muchas incertidumbres personales y profesionales, así que vivo cada invierno sin saber si estaré aquí el siguiente, pero mientras tanto disfruto estos paseos sabiendo que aquí encontré mi pequeña geoda…

domingo, 13 de noviembre de 2011

¿Te comerías a tu gato?

Repasaba una noche de esta semana mi ‘time-line’ de twitter, cuando encontré por casualidad una página de test filosóficos sobre la moral, tanto propia como colectiva. 
Aunque era algo tarde y estaba cansado, no me pude resistir a hacer un par de entre varios cuyos títulos eran tan impactantes como el que da nombre a esta nota.
El test  ‘¿Te comerías a tu gato?’, según lo ibas haciendo te ibas dando cuenta de que lo que se pretendía averiguar de ti era la percepción que tenías sobre algo aparentemente reprobable o incluso repugnante para algunos, y si difería el hecho de que lo hicieran otros o tú mismo. Al acabarlo comparaban tus resultados con los de los demás, y te daban una explicación sesuda sobre tus principios morales también en relación contigo mismo y con los demás.
En resumen, en éste y otros test como el de ‘¿Matarías al hombre gordo?’, de alguna manera (aunque un poco estresante eso sí), se evaluaba el nivel de coherencia de nuestra moral, algo tan poco de moda en estos días….
Y si ya nosotros mísmos tenemos serios desajustes entre lo que pensamos, juzgamos y hacemos, para qué os voy a contar cómo cambiamos cuando nos sumergimos en la colectividad. ‘Cuando las personas se convierten en gente dan asco.’, decía un antiguo compañero de trabajo al respecto.
Son cantidad la de efectos psicológicos y sociológicos los que se dan al pasar de ser personas a gente, algunos de los cuales son muy conocidos y cotidianos (el dramático ‘Efecto espectador’ es un claro ejemplo), y otros dan para echar un buen rato con los amigos y unas cervecitas.
Por ejemplo, para redactores del horóscopo y de test para revistas femeninas, incuso para  ‘algunos’ políticos, decir ambigüedades según ‘El efecto Forer’, les puede ser de mucha utilidad, pues siempre habrá mucha gente que se identifique con el mensaje.
A algún infiel me extrañaría en cambio que le cuele la excusa de ser víctima del ‘Efecto Coolidge’ si le pillan con la nueva vecina, aunque sea de aplicación a todos los mamíferos.
Y ya para terminar, ahí dejo otro efecto motivo de conversación cervecera:
Resulta que en las últimas décadas las puntuaciones de test de coeficiente intelectual subían de manera constante década a década en todo el mundo según ‘El efecto Flynn’, parece ser debido a mejoras en alimentación y sanidad.
Eso ha sido así hasta la década de los 90, en la cual se han estancado las puntuaciones…
¿Algo que decir cervecita en mano?

domingo, 6 de noviembre de 2011

'Espalda contra espalda.'

Hay libros que te enganchan más, otros quizá no tanto….
De algunos, te quedas con la idea central que interpretas quiere transmitir el autor, aunque te resulten un poco pesados de leer por su estilo narrativo.
Otros son algo más superficiales, pero tienen una redacción fresca y dinámica, que hacen que vuelen sus páginas entre tus dedos.
Muy de cuando en cuando, cae cerca de tu mesilla una obra que combina magistralmente ambas facetas, y te dedicas a sacarla del dormitorio y pasearla contigo a todas partes, aun con un elevado riesgo (en mi caso)  de perderla…
Pero lo que no me ocurre todos los años, es disfrutar de  una obra que cambie de manera importante mi visión del mundo.
La última de este tipo la leí hace unos meses: ‘Los próximos cien años.’,  de George Friedman, experto de renombre mundial en geopolítica.
El título de la obra es bastante explícito, pues a lo largo de sus párrafos el autor va desgranando en base a razonamientos históricos, geográficos y políticos, como prevé la historia década a década del presente siglo…
La verdad es que no sé qué grado de acierto podrá tener en sus predicciones, pero de lo que me quedo con el libro, es que vivimos en un mundo mucho más inseguro de lo que percibía antes de leerlo.
Mis conocimientos de historia son muy elementales, y si a eso le sumas que he nacido y me he criado en décadas de paz en la zona occidental del Viejo Continente, de alguna manera inconsciente he asimilado esa situación como inmutable…
 No obvio que aunque desde pequeño no he parado de ver guerras en los telediarios, siempre las he percibido como algo lejano de los países desarrollados, y la excepción a ésto, la Guerra Fría, me pilló en su última fase en pantalón corto subiéndome a los árboles para hacerme tirachinas…
El caso es que tras la lectura de sus párrafos, veo el mundo, países desarrollados incluidos, en una permanente tensión que a la vez lo impulsa, como aquel juego infantil que nos hacían practicar en clases de gimnasia, que consistía en juntar espaldas sentados por parejas, y combinando fuerza con habilidad, conseguir ponerse de pie empujando los dos miembros con la misma intensidad y en la misma zona….
Ni que decir tiene que esto se puede extrapolar a muchos y variados  ámbitos de la sociedad actual, pues así percibo desde hace mucho más tiempo, que se rigen muchos consejos de administración de importantes empresas y desde luego los órganos de gobierno de los partidos políticos…
Ahora bien… ¿Recordáis qué pasaba cuando tras un importante esfuerzo ambas personas estaban a punto de erguirse, y de repente una de ellas daba un empujón arrebatado cuya pareja no podía contrarrestar en ese mismo instante…?

jueves, 3 de noviembre de 2011

El mortero.


Creo recordar que cuando me lo regaló para mi nueva casa, supongo que poco antes de mudarme, me dijo que me traería suerte.
Aunque hace unos años que nos abandonó, su alegría y sus ganas de vivir contagiosas fueron un regalo para una familia que en aquellos momentos lo necesitaba. Por ello, de alguna manera formó parte de ella desde el primer día y su recuerdo perdura a diario en nuestros corazones.
Desde hace poco, mi madrina me echa una mano en casa, y como es habitual en alguien que sólo regresa a dormir, no suelo estar cuando lo hace. Ni que decir tiene que al ordenarme la casa con todo el cariño del mundo, cuando llego me cuesta encontrar algunas cosas, de la cocina sobre todo,.
El mortero pertenece a este grupo, y reconozco que me encanta buscarlo por los armarios, los días como hoy, en los que recién llegado no lo encuentro tras su visita, para volver a ponerlo de nuevo en su sitio, sobre la encimera de la cocina, entre el microondas y la vitro.
Puede parecer una tontería, pero me gusta pensar que si me puede ver, con este trasiego de mortero las últimas semanas, sonríe y se alegra de que no deje que se guarde su recuerdo.
Podría decirle a mi madrina que no lo guarde nunca más, pero moverlo de sitio una vez a la semana no es para tanto…….  
¿O no?

lunes, 31 de octubre de 2011

Desde que estoy sordo caigo mejor a la gente.

           Siempre he vivido en las nubes, o mejor dicho, en mis nubes. Nunca he ocultado que sueño despierto, y a veces desconecto por un tiempo que para mí puede ser un instante y para la gente que me acompaña minutos.
Afortunadamente, cuento con excelentes amigos que no se enfadan conmigo por ésto, ni cuando no les saludo por la calle porque voy ensimismado en mis cosas, pues saben que les adoro…
Me cuesta también mucho esfuerzo prestar atención a cualquier conversación normal pues mis pensamientos, muchos y variados, van muy deprisa, y se atropellan en mi cabeza mientras me hablan.
Consciente de estos problemas de comunicación, intento usar técnicas de escucha activa desde hace años, y resulta paradójico que ahora que creo que llego a tener un nivel aceptable escuchando me estoy quedando sordo., También es posible que me hayáis visto en alguno de los múltiples actos sociales a los que me ha tocado asistir, un poco apartado sujetando una copa por el tallo y mirando al infinito.
Sin embargo sordo y todo, en estos actos creo que cada vez caigo mejor a los desconocidos con los que me encuentro y muchas veces comparto mesa. Supongo que me voy dando cuenta de que aunque sin oír, asintiendo y llamando al resto de comensales por su nombre, me voy apañando. Lógicamente, cuanto menos oigo menos hablo, y en esos casos hablo sólo del contexto que le interesa a mi interlocutor, mostrando interés sincero…
Espero volver a oír pronto, pero reconozco que la ausencia de unas habilidades me está sirviendo para potenciar otras que os animo a practicar…

martes, 25 de octubre de 2011

'Alucinando en colores'

A veces pienso que debí nacer tres horas tarde, pues suelen ser las que me faltan casi a diario para completar mi rutina como me gustaría….
Así que muchas veces el tiempo se lo robo a la tv, y lamentablemente otras tantas al sueño, así que, en este sentido, las series de internet son una buena solución para ver algo a sin horarios impuestos ni anuncios….
Una de las últimas series que estoy viento es ‘The Big Bang Theory’,  simpática comedia en la que convergen los mundos  opuestos de unos físicos teóricos, con su atractiva vecinita eterna aspirante a actriz…
Además de las divertidas tramas y un montón de alusiones frikis (con perdón de la RAE), resulta que la serie incluye cantidad de chistes y alusiones a efectos y fenómenos físicos reales, algunas de mucho nivel teórico e incomprensibles para cualquier cristiano.
Como en mis años mozos el tiempo que no invertía en ver fútbol en tv lo dedicaba a leer libros de física teórica y astrofísica (a quien le interese le recomiendo ‘Superfuerza’), sin ánimo de causaros excesiva repulsión, os diré que entiendo la mayoría de los exóticos guiños. Por ello hace unas pocas semanas sentí una mezcla de sorpresa y admiración al oír en un episodio dos palabras que nunca pensé que oiría en una comedia: ‘Cromodinámica cuántica’.
Por no enrollarme más, os esquematizo ( de forma bochornosa si me lee un físico’): hay unas partículas muy chiquititas que componen parte de los átomos y se llaman ‘quark’, que a diferencia de otras (protones por ejemplo) que tienen carga eléctrica que es simple y sólo puede ser positiva o negativa, tienen una carga de cualidad triple…
¿Qué pensáis que hicieron los descubridores de ésta propiedad?
Pues usaron colores primarios para definirla, la llamaron ‘Carga de color’, y dijeron que esquemáticamente podía ser roja, verde o azul; y sus opuestos anticolores serían cian magenta y amarillo.
Pensad por un momento que razonáramos igual que estos originales investigadores en el campo de nuestras emociones cotidianas....
De igual manera que cada idioma reconoce multitud de términos asociados a las emociones, lamentablemente cuando  sentimos algo por alguien y lo expresamos, la mayoría de las veces recurrimos a adverbios de cantidad ‘te quiero mucho’, ‘muchísimo’, ‘un montón’………; como si el amor o el afecto fueran una cualidad medible que se expresa en una sola dimensión como la carga eléctrica o la temperatura de los cuerpos, una línea tan simple como la que vemos en el  avanzar o retroceder del mercurio en los termómetros..
¿No sería tremendamente curioso y original decirle a alguien que le quieres azul, sientes un afecto verde, un desprecio magenta, o una indiferencia amarilla…?

lunes, 17 de octubre de 2011

Del otoño y mis viejas suelas...

Si pudiera valorar de alguna manera la dificultad que me supone tomar una decisión de mi vida personal, la forma más adecuada a mi forma de vida actual que se me ocurre, es medirla en kilómetros caminados por el paseo marítimo de mi barrio hasta alcanzar una determinación particular en cada caso.
Hasta ahora no lo he hecho, pero sí me doy cuenta de que, por alguna razón que desconozco, debo tener algún extraño gen que hace sea capaz de tomar decisiones más o menos difíciles con mucha más facilidad que otras cotidianas.
¿Recordáis cuando de niños nos tapábamos con mantas y nos creíamos que así estábamos protegidos de cualquier monstruo o amenaza imaginaria?
Por esa misma razón infantil quizás el otoño sea mi estación favorita, pues año tras año siento que cuando llega esta estación, en contra del sentido común y de mi propia coherencia, me haya ido bien o mal en el año que acaba, me autoengaño pensando que da igual posponer decisiones hasta el año que viene, y me quedo en mi zona cómoda

          

viernes, 14 de octubre de 2011

'Manchando lienzos, buscando faros.'

Hay quien dice que lo que realmente nos cuesta de elegir una entre varias opciones no es estar seguros de que es la que realmente queremos, sino renunciar a las otras que dejamos atrás...
                Yo no sé si eso es cierto, pero a lo largo de mi vida me ha tocado contemplar más de una vez como mi primera opción se desmoronaba, y tras un periodo de desconcierto inicial, intentar pensar que no era tan malo volver hacia aquello que voluntariamente había descartado antes……
Vivir durante una temporada más o menos larga mi particular ’Plan B’, me ha hecho, salvo algún año ‘raro’, ir anotando en un cuaderno mental, esas cosas que siempre quise hacer, y que por estudios, trabajo, circunstancias personales, e incluso pereza, tenía pospuestas sin fecha…
Y puestos a hablar de fechas, dicen también por ahí que cuando a los sueños e ilusiones se les pone fecha, se llaman objetivos, y para mí uno de ellos este curso escolar que ahora comienza podría llamarse ‘manchar lienzos buscando faros’, o lo que es lo mismo, recibir clases de pintura en una vieja cochera de San Javier los viernes por la tarde.
Como no podía ser de otra manera para alguien como yo (cuyos días deberían tener 27 horas por lo menos), he llegado tarde, pues fiel a mis principios, no he renunciado a mi vermú de los viernes mediodía con mis compis del curro, ni a mi siestecica en tierras galileas.
Estresado antes de entrar y cargado de pinceles y óleos de los chinos, pero sin caballete ni paleta,  he llegado a la cochera de mi profe, y una vez que este paciente hombre ha completado mi equipo, me he enfrentado a mi primer lienzo en blanco, en el que me gustaría conseguir un borrón parecido a la fotografía que os adjunto del Faro de Cabo de la Roca.
La verdad es que la primera tarde no ha ido mal. En primer lugar he dibujado a lápiz las líneas principales; y el resto del tiempo lo he dedicado a los colores base de prado y cielo, con cierto complejo de daltónico. En general, al igual que cuando comienzas a conducir(o incluso a bucear), en tus primeras prácticas estás más pendiente de tus propias reacciones ante lo que haces, que de lo que realmente haces.
Pero en cualquier caso, como ilusión no me falta, y no tengo prisa ninguna, sé que voy a disfrutar mucho los viernes de este curso, y ya estoy elaborando mentalmente una ‘playlist' adecuada para estas clases, en la que, de momento, no faltarán Portishead, Radiohead o Sigur Rós…
Entretanto los chinos se frotan las manos….
Saludos.
Santi.

domingo, 9 de octubre de 2011

‘‘Carreteras secundarias. La entrañable boda segoviana de Marta y Miguel.’’

(Publicado en facebook 9/07/2010)

No os descubro nada nuevo a ninguno de vosotros, si os digo que a veinte minutos, de cualquier salida de autovía y previo paso por las correspondientes carreteras secundarias, este país de contrastes en el que vivimos, alberga lugares maravillosos que merecen ser visitados.

En concreto, este fin de semana pasado, Marta y Miguel, con motivo de su enlace, regalaron a unos cuantos afortunados, la posibilidad de visitar Sepúlveda y sus alrededores……..

Haciendo honor al carácter reposado y tranquilo que la mayoría de sus amigos de la carrera tenemos, decidimos quedar la noche antes en un hotel de Sepúlveda (Vado del Duratón), cuyos dueños serían los mísmos que al día siguiente nos servirían el banquete.

Si no conocéis Sepúlveda, os sitúo, preciosos pueblo castellano de piedra y teja, con estrechas calles empedradas e irregulares, la mayoría en rampa., y por supuesto eso sí, con una precisa plaza mayor central, con sus tiendas de productos tradicionales, y varios bares con terrazas, en definitiva, idílico.

¿El hotel?, pues …… ‘con encanto’, que si, sin coñas, pequeño, coqueto, y con excelentes vistas panorámicas……

Yo llegué el primero, al haberme tomado el día libre para llegar en coche (muy importante para que no se arrugara el traje, faltaría……), y para mi sorpresa, pronto llegarían el novio con su encantadora madre al hotel:

-Miguel¡¡¡ Enhorabuena ¿cómo estás? ¿nervioso?
-Mmmmm (pausa de tres segundos, mirada seria y gesto dubitativo) No se, Paraguay puede ser un rival difícil, ya veremos. Como en el restaurante no hay tele, supongo que después de la boda iremos a verlo a los bares del pueblo…

Poco a poco, y a lo largo de la tarde noche fue llegando la peña, algunos directamente a los bares de tapas, dónde cenamos, y en un acto de responsabilidad, que aún me sorprende, no recogimos temprano , y por una vez, sólo nos tomamos ‘n-3’ copas y cervezas, siendo ‘n’ las que nos tomamos habiatualmente cuando nos juntamos, y el novio, en un comportamiento impecable ‘n-4’ ( toma ya¡¡).

El sábado, ya desayunados y vestidos de boda, tras comprar unos paraguas, nos acercamos en coche de nuevo por carreteras secundarias e incluso caminos de tierra, a una de las celebraciones más pintorescas a las que he tenido la suerte de asistir.

Por una rampa de tierra completamente embarrada, desfilábamos a partes iguales, empapándonos por la lluvia con viento racheado, invitados y excursioncitas, y cómo no podía ser de otra manera, tuvimos nuestras charlas….

- Qué valor tiene los novios, anda que haceros venir así, ya os darán bien de comer…..
-Eso espero señora……
-Y dime joven ¿ por aquí suele hacer este tiempo?.
-No lo se señora, yo vengo de Murcia.
-¡¿ Y has venido de Murcia?!, Pues te estás poniendo perdido de barro el traje. Anda ven que te recoja los bajos del pantalón.

Y con lo bajos remangados como si fuera un pescador, más o menos un kilómetro después, llegué a la maravillosa Ermita de Frutos (s. XI).

Marta llegaría, un cuarto de hora más tarde, preciosa y cabreada a partes iguales……., y la boda fue íntima y entrañable, con escapadita de algunos guiada por su tío a los alrededores (me pareció bonito hasta el cementerio).

Tras la boda, para tranquilidad y sosiego de Marta, los paraguas para el temporal nos fueron de gran utilidad, para el solanero que nos cayó subiendo lo que con barro antes bajamos, y tanto se alegró la novia, que se pasó media boda bailando la jota ¿segoviana?.....

Tras la vuelta a Sepúlveda, entre fotos cañas y copas, disfrutamos de un excelente banquete, y posterior juerga, que sólo se interrumpiría para los más forofos para ver a ‘La Roja’ frente a Paraguay.

Después del partido….., pues algunos se cambiaron, y otros, de la misma guisa, quemamos la noche sepulvedana, hasta que nos echaron del último garito, ( supongo, porque esto último no lo recuerdo muy bien).

Y el domingo ya de vuelta, de nuevo agotado y encantado a partes iguales, con Gardel en la radio, muy a mi pesar (había hasta un concurso de pintura rápida en el pueblo), tuve que dejar las carreteras secundarias para volver a la autovía.

Un abrazo enorme, a novio, familia y amigos, por un fin de semana inolvidable.

Ermita de san Frutos.

Sepúlveda.

Crónicas volcánicas: Recordando a Willy Fog (2ª parte y fin).

(Publicado en facebook 30/04/2010)

En fin amiguetes, según os había prometido, termino la crónica, ya desde tierra patria, y cómo podéis intuir por el título (otros lo sabéis porque habéis estado hablando con nosotros), finalmente, a mi querido y sufrido amigo Alberto y a mi nos toco llevar a cabo lo que en la primera parte llamaba ‘Plan B’, o ‘Vacaciones en el mar’’, como queráis…..


La decisión de tomar el barco, supuso un punto de inflexión en el viaje, y cambio nuestra simpática rutina descrita en la primera parte. Más que nada elimino la parte de la incertidumbre y de los correspondientes madrugones, Lo de las siestas y las cervecitas como os podréis imaginar no sufrió cambios apreciables (jodidos pero alegres, faltaría más….).

Así pues el domingo, ya más tranquilos, nos tomamos vacaciones de las vacaciones (suena raro, pero ser turista accidental también cansa….) y sustituimos los museos y las iglesias, por la visita al parque de turno como si fuéramos un dominguero más (en este caso a Regent´s Park, con posterior paseo por Little Venice). Por la noche pensamos durante las cervecitas: ‘‘Ya que tenemos que ir a Portsmouth a coger el barco ¿ por que no viajamos allí el día antes y hacemos más turismo?, va a estar genial, todo lleno de españoles, ya veras, ya……….’’

El lunes lo dedicamos a ultimar nuestro periplo multimodal, pensad que salvo burro, bicicleta y globo aerostático, no nos privamos de utilizar la mayoría de los principales medios de transporte existentes. Ah, se me olvidaba, y casi quedarnos atrapados en el ascensor del penúltimo museo para preocupación de Alberto y mi descojone…..

Por fin el martes, comenzó nuestro viaje, que hasta media mañana del viernes nos llevaría:

- de Londres a Portsmouth en tren durante dos horas y media.
- de Portsmouth a Santander en ferry durante veinticuatro horas.
- de Santander a Alicante (pasando eso sí por Bilbao, Vitoria, Logroño y Teruel), en bus durante trece horas.
- De Alicante a nuestra querida tierra, en el coche de mi soñoliento compañero Alberto durante una hora.

Como os podréis imaginar en lo referente a la experiencia, casi nada fue como lo planeamos, lo cual no me sorprendió, con mi pesimismo habitual, pero a mi Albertico…..

Bueno, os cuento resumidamente:

- En el tren conocimos a un simpático matrimonio de Barcelona de nuestra edad, que posteriormente haría nuestra estancia en el barco más llevadera, y con los que esperamos coincidir en futuras ocasiones.


-En Portsmouth, a partir de las 17:30 sólo se oía un triste pajarico por las calles del centro; y en los bares…….. en fin tan sólo universitarias con poca ropa y al parecer sin frío. Tentador, pensaréis algunos, pero aquel ambiente podría haber sido una mezcla entre ‘Yo soy la Juani’, ‘Showgirls’ en cutre, y ‘Fisica o Química’.

- En el ferry, realmente era un barco de crucero, aunque pequeñito, pero los españoles éramos una clara minoría; y la juerga, pues imaginaros, unos pocos guiris borrachos cincuentones haciendo el hombre de hojalata, y unas ‘ni-nis’ españolas bailando el aserejé, así que nuestra esperanzas de bailar Paquito Chocolatero quedaron dramáticamente truncadas entre cerveza y cerveza…….

- Tras una parada técnica en casa de amigos de Alberto de Santander ( la primera comida decente en muchos días), y la visita obligada a la península de la Magdalena, del bus, ¿Qué os puedo decir?, durante aquellas interminables trece horas que duró el viaje me preguntaba constantemente en aquella madrugada, si íva a ser capaz de soportar tanto gozo………


Pero todo acaba y cómo no, nuestra aventura también. Me siento tentado a soltaros cualquier rollo pseudofilosófico de los muchos que he tenido tiempo de madurar durante los días que ha durado el viaje, pero como os aprecio y se que no os lo merecéis, lo reservo para otra ocasión...

Termino con un fuerte abrazo, a todos los que os habéis interesado por nosotros estos días, y cómo no, a Alberto por sufrirme estoicamente todo el trayecto. Confío en tener un próximo viaje más tranquilito……

Cronicas volcanicas: Atrapados en Londres. Primera parte.....

(Publicado en facebook 18 de abril de 2010, in situ, en Londres, en medio de la mayor crisis aérea, desde la 2ª Guerra Mundial)

Queridos amigos:

Como ya ocurrio en mi anterior viaje, escribo estas lineas animado por algunos de vosotros, para contaros ademas de la visita turistica al territorio londinense mi particular aventura, causada como ya sabeis todos a estas alturas, por un volcan islandes de nombre impronunciable para cualquier cristiano.

¿Qué hago exactamente en Londres? Pues siendo breve y conciso os dire que dando una vuelta con mi amigo Alberto.

Para los mas curiosos completaré diciendo que se trata de un viaje improvisado, en el cual (en teoria) llegabamos el lunes a mediodia, nos paseabamos por el centro martes y miercoles ( musical de Queen incluido ) y volv'iamos tranquilamente el jueves a mediodia ? Facil, no? Bueno, no tanto.....

Todo ocurrió segun lo planeado ( con alguna anectoda que otra pero bueno........) hasta el jueves.....

Llegamos al aeropuerto ( madrugon incluido) y tras pasar todos los controles imaginables ( solo falto el tacto rectal....) ya delante del panel se produce la siguiente conversacion:

-Alberto: Nuestro vuelo esta cancelado.
-Santiago: (Me estaba quitando las leganas) ?De verdad?
Alberto: Si, mira al panel.
Yo: Es verdad, vamos a desayunar.
Alberto: Que el vuelo esta cancelado.
Santiago: Vamos a desayunar y ya veremos.....

Pues efectivamente desayunamos con una tranquilidad propia de un anuncio de ron dominicano y a partir de ahi, si habeis visto las noticias, el resto lo sabreis hasta el dia de hoy......

¿Y que ha sido de nosotros?

Para los que teneis una dosis adicional de curiosidad, os dire que desde el jueves nuestra vida podria sintetizarse en los siguientes títulos (Creo que los que me conoceis sabeis que soy un poco peliculero...), que son:
-"Atrapado en el tiempo".
- "Volcano"
-"La isla"
-"Los lunes al Sol"

Los tres primeros estan clarísimos pero el ultimo merece unas lineas más para los que habeis tenido la paciencia de leer hasta aqui. En resumen, nuestra rutina desde el jueves ha sido la siguiente:

1) Madrugón acojonante ( más o menos a las 6 aunque si es hora local o espanola lo sabe Alberto (*))
2) Desayuno ingles.
3) ¿Saldra hoy el avion? La respuesta suele ser que no y cambiamos el vuelo para el dia siguiente.
4) Museos.
5) Comida y siesta.
6) Cervecitas por el Soho ( Happy hour incluida).

"Pues no estan tan mal" pensareis, y efectivamente era asi hasta ayer, cuando el lunes cambiamos el vuelo para el martes !!!4 dias mas!!!!????

Una vez superado de forma dramatica el sindrome de Peter Pan , hemos ideado un plan B, cuya pelicula podria titularse:
"Vacaciones en el mar" ( Spanish version, eso si...);
y es que tenemos billete para el miercoles desde Porthsmouth a Santander por si el avion falla otra vez ( todo parece indicar que si....).

Seguiremos informando....

Besos y abrazos.

(*) Cualquier dia me mata porque la alarma la pongo yo y no cambie la hora porque......total para dos dias........
P.D. Texto escrito con teclado ingles, no digo mas.......

Ideas peregrinas (mi camino de Santiago).


(Publicado en facebook 8/11/2009)

Como algunos de vosotros sabréis si os habéis conectado últimamente en facebook, recientemente he tenido la oportunidad de realizar las últimas etapas del Camino de Santiago, en una travesía a pie que comenzó en Ponferrada (León) y finalizó en Santiago de Compostela (lo cual por otra parte, yo pensaba que era lo obvio, aunque posteriormente descubrí que hay muchos peregrinos que deciden finalizar en Finisterre).

Bien, escribo estas líneas animado por mi amiguete Luis Gella (espero que me comentes algo), y espero despertad la curiosidad de los que las leáis y no hayáis peregrinado todavía.

Un factor muy determinante en mi caso de la fantástica experiencia que supuso este viaje fue que, condicionado por las fechas en que pude disfrutar mis vacaciones este año ( 2ª quincena de Octubre), me planteé hacerlo solo.

Así pues e intentando ser breve os remiré el viaje: estuve diez días fuera, de los cuales: dos los consumí en la ida y la vuelta; y durante los ocho restantes caminé una media de ocho horas diarias, la mayor parte de ellas solo. Si bien a ratos coincidía con otros peregrinos, unas veces caminando; otras en bares a mitad de camino. Tuve la suerte de encontrar en los albergues un grupo de españoles (estábamos en clara minoría respecto de los peregrinos extranjeros) con los que hice amistad, y compartí en esos días, después de llegar a los correspondientes destinos, comidas, cenas, cafés, copas, confidencias,….. y, en definitiva muy buenos ratos ( las anécdotas me las reservo para contároslas tomado unas cervecitas), que convirtieron la incertidumbre inicial por irme solo, en el orgullo personal de haber completado con éxito esta experiencia, simplemente siendo yo mismo.

A la pregunta que me han hecho algunos de si me ha cambiado espiritualmente el viaje, respondo con guasa que ‘‘igual recibí la llamada, pero no tenía cobertura’’. Ya en serio, ahora mismo, por mis circunstancias personales tengo tiempo más que de sobra para reflexionar sobre lo divino y lo humano en general, y sobre mi vida en particular, así que para mi suerte o desgracia vengo igual que me fui, aunque para no ser tan drástico os diré que me siento algo más libre.

En cualquier caso, si os puedo aportar mi visión particular del Camino, más allá del ámbito religioso, deportivo, turístico, histórico, artístico o la dimensión dominante que para cualquiera de vosotros pueda tener esta famosa ruta de peregrinación. Para mi el Camino es la metáfora mas clara que he vivido de mi forma de ver la vida por lo siguiente:

• En el Camino, como en la vida, los bienes materiales, no solo no nos hacen más feliz, sino que muchas veces, son un verdadero lastre para disfrutar verdaderamente. Yo esto lo tenía clarísimo antes de partir, pero me dejé llevar por la incertidumbre, y el peso de mi equipaje duplicaba el recomendado. Las consecuencias de este hecho condicionaron totalmente mi viaje, pues realicé dos terceras partes del recorrido cojeando a punto de lesionarme rodillas y talones, y además realicé bastantes menos paradas intermedias de las que me hubiera gustado por miedo a no poder continuar. Como anécdota al respecto os diré que en una de las etapas vacié media botella de gel, tiré revistas leídas y el bote de espuma de afeitar…….

• Lo importante cada día no era llegar al destino, sino era disfrutar con el viaje. Conocí a gente que durante la travesía, pintaba paisajes, realizaba fotografías, cogía setas, tomaba el sol en ropa interior, no dejaba un bar sin visitar, o incluso se sentaba a charlar un ratico con un campesino que cortaba cañas para elaborar cualquier útil artesanal. Supongo que si cualquiera de ellos hubiera primado el destino, hubiera llegado un par de horas antes, pero se hubiera perdido gran parte de esto. Y es que supongo que en la vida como en el Camino hay que valorar los éxitos por el consumo de recursos que has realizado para obtenerlos, pues intuyo que muchas veces pagamos un precio demasiado alto por éxitos que, a posteriori descubrimos que hemos sobrevalorado.

Y no me enrollo más, solo deciros que peregrinar es adictivo, que más que un viaje es una forma de vida para muchos (conocí a gente que venía andando de Madrid, o Jerusalén), y que albergo la ilusión de repetir muchas veces, y de hacerlo completo algún día.

Microrrelato Sonorama



(Publicado en facebook 27/03/2011 , Lo mandé con escaso éxito al concurso de la organización, a ver si conseguía pase VIP. El año que viene mando media docena...)

Noches frías, noches claras, noches mágicas…………….; siempre la arena.
             
         Lleva ya unos años trabajando y sin embargo, para él, los años se cuentan por cursos que empiezan en septiembre.

-¿Por qué no hablas? Di algo………


Hay noches cortas, noches largas………………..; siempre música.

         Son sus minutos cada agosto, unos años sus ojos brillan más, otros menos……; unos años con más gente, otros quizás con su eterno acompañante, pero absorto por la música decide en Sonorama su próximo curso………..

Hay noches solas, noches cálidas, nostálgicas…………..; siempre Aranda.

-No te pierdas. Vente con nosotros………

    
   Y siempre se pierde, a por sus minutos, cada festival.

Noches frías, noches claras, noches mágicas……………; siempre un oasis.

¿Por qué debería ir al 30594?

(Nota : 4 años más tarde el incombustible Ignacio Sánchez, nuestro Kiki, vuelve a la carga con otra edición del 30594 Festival, con la mísma ilusión, las mismas ganas, y cómo no, el mismo mérito. Además de melómano, es todo un  filántropo  y le deseo la mayor de las afluencias. Espero que el próximo sábado saque cinco minuticos para tomarse una cerve conmigo.)



Los que más me conocéis sabéis que ir a festivales y conciertos me gusta casi tanto como dar a conocer mi querido Pozo Estrecho, cuyos vecinos, como los de la aldea de Asterix ( por cierto ellos eran galos y nosotros galileos…….), somos pocos pero inquietos……….., sobre todo en lo que a cultura y fiestas se refiere.

De hecho como comentaba hace poco en un cartel, junto al festival 30594, tenemos ciclo de teatro, fiestas de San Fulgencio, fiestas de Campo Música y Flores, haloween, cruces de mayo, jornadas gastronómicas, mercadillo navideño, vaya, que ya solo nos queda traer los San Fermines ( con perdón por los eventos que seguro que me dejo)......

Así que el hecho, de que hace ya unos años, mi inseparable compi de conciertos Kiki, se echara la manta a la cabeza y montara un festival para nosotros me parece además de encomiable, todo un lujazo que no hay que desperdiciar.

Como os podéis imaginar, al partir de una iniciativa exclusivamente privada, este buen hombre y toda la gente que le apoya, han tenido que currar muchísimo para buscar todo tipo de financiación con la mera ilusión de poder realizarlo.

Siendo consciente de la información de los grupos del cartel la tenéis tan sólo aun click, no me enrollo mucho más, y espero veros allí a muchos de vosotros, y será señal de que 30594 podrá volver a repetirse……….

Un abrazo. Santi.